Lo que pudo ser y no fue.

No quiero mañana recordar el pasado y pensar en lo feliz que pude ser y que no disfrute de aquello... el futuro es hoy, por eso hoy quiero disfrutar de todo lo que venga, sin límites, sin barreras ni excusas que me lo impidan, disfrutar de lo bella que es la vida, no pido más de lo que tengo, porque todo lo bueno que me llega, de alguna forma me lo merezco, aunque no lo sienta así, y si soy feliz... que importa si me gane o no las cosas que me da la vida y sobre todo si las disfruto...

La duración de nuestra vida, nuestros sueños y nuestros problemas, por más profundos e intensos que sean, no son nada comparados con la inmensidad del infinito universo en el que vivimos, y si sumamos los universos paralelos... pufff... no somos nada. Así que no nos compliquemos, vivamos lo que venga, como venga, a reír y a llorar, para bien o para mal, la vida es así, nos guste o no, la vida sigue.

Así que mi Perrito, mi Bro, mi hermano, ánimo y no se deje caer... que nunca ha dejado de hacer frio después del calor... ni tampoco ha dejado de hacer calor después del frio... hay que adaptarse, ese es el don que tenemos los seres humanos, la evolución, la vida fluye y cambia a cada segundo, la única certeza que tenemos es que podemos dejar de existir en cualquier minuto, y en el minuto final, solo tendremos en mente lo que no se hizo, es mejor arrepentirse de una mala inversión que jamás haber invertido.

Quién no se siente agradecido por las cosas buenas que tiene, tampoco se sentirá satisfecho con las cosas que desearía tener.

El que no aprende el idioma de la gratitud no podrá dialogar con la felicidad.

La felicidad empieza cuando uno deja
de lamentarse por los problemas que tiene, y agradece por los problemas que no tiene.

“He aprendido a contentarme cualquiera sea mi situación.”

Apostol Pablo.